Rosh Jodesh Iyar 28 de abril 2025 (48 horas)
FUENTE: Javier Wolcoff – Youtube Kabalah Aplicada / Web: e-kabalah.org
Las próximas 48 horas se abre un portal cósmico, comienza el mes de Iyar (Tauro en el calendario Lunar) y durante esa pequeña ventana de tiempo que conocemos como Rosh Jodesh, tenemos la posibilidad de tomar control sobre la energía del mes. En estas 48 horas el mes completo se encuentra en estado potencial o semilla.
Los kabalistas explican que como uno se comporte y con la conciencia que conecte en Rosh Jodesh, así serán programados los próximos 30 días. Este conocimiento es una gran herramienta ya que facilita el tránsito por el ciclo lunar que comienza. Hoy estamos aquí para tomar control del mes y conectar sólo con los aspectos positivos del mismo.
Lo que primordialmente determina cómo va a ser el mes, es lo que está en nuestra cabeza. Cuando aparece bíblicamente la idea de Rosh Jodesh, hace 3400 años, cuando la Torá lo menciona: a partir de esta Luna Nueva va a ser el comienzo de los meses (Aries) y le pide que lo comunique a la gente, incluye la palabra Daat, que son las mismas letras que la sefirá de Daat.
Daat tiene que ver con el pensamiento subjetivo. Es un tipo de intelecto que no es necesariamente cierto, pero para aquel que lo sostiene, para aquel que lo percibe de una determinada manera, si algo es bueno o malo, esa es la única realidad que hay.
Para un ser humano, su percepción de la realidad, hasta el momento que alguien logre hacer que eso cambie, o la vida misma le cambie la percepción, es algo totalmente subjetivo y que sólo él puede entender, incluso esa nueva percepción.
Es imposible entender el punto de vista de otra persona, incluso cuando creemos que entendemos, lo entendemos desde nuestra percepción de la realidad.
Siempre es algo autoreferencial, no es necesariamente una verdad. Ese tipo de intelecto, que es lo que llamamos el conocimiento, el cómo uno reconoce una realidad, pertenece a una subsefirá o a una parte del árbol de la vida que no estaba planeado que existiera desde un principio de la creación, que se llama Daat.
Es un intelecto creado por el hombre, a diferencia de Jojmá y Binah, que son la sabiduría o el pensamiento de la creación y el pensamiento creador que dio lugar a esta realidad física. Dejaron al hombre «suelto» en La Tierra un par de horas, comió del árbol del conocimiento del bien y del mal y trajo a este mundo físico un nuevo tipo de intelecto, que es el intelecto que cada uno de nosotros inventa. Una realidad que sólo nosotros la vemos.
Dos personas van por la calle y pareciera que están en el mismo planeta, en la misma ciudad y calle, pero cada uno ve algo totalmente distinto. Pensamos que sí, que el otro ve lo mismo y por eso nos molesta tanto cuando el otro no ve lo mismo.
Ese pensamiento subjetivo está en un lugar en donde afecta directamente nuestras emociones, y nuestras emociones afectan directamente la realidad que percibimos, con lo cual, la mayoría de la gente del mundo viven en un sistema de retroalimentación viciosa en donde la percepción que tienen del mundo los hace sentir de una cierta forma, y esa forma en la que sienten, proyecta una determinada vibración que moldea la realidad donde vive.
Crea una realidad que es idéntica a lo que él tiene en su pensamiento, con lo cual, lo que hace constantemente es crear un mundo alrededor de él que justifique su forma de pensar.
Entonces, todo lo que está en nuestra vida, incluyendo la enfermedad, que es de lo que vamos a hablar primordialmente, es algo que la persona creó para sí mismo, para poder justificar la forma en cómo él piensa. La forma en cómo él percibe la realidad.
Dentro de todos los meses del año, este mes en particular es especial. Cada mes del año tiene una energía nueva y distinta, tiene una inteligencia y viene a aportar algo.
Hay un paquete de energía contenido en el mes que tiene una inteligencia especial. La energía que se revela en este mes de Tauro o Iyar, durante 48 horas, es la energía de la salud, de la sanación.
El nombre del mes: Iyar, es un acrónimo de una frase que aparece justo después de que el pueblo de Israel atraviesa el Mar Rojo, en donde el Creador habla con Moisés y con el pueblo y dice: Los ejipcios que conocieron hoy, nunca más los volverán a ver. Las plagas que vieron sobre Ejipto nunca pondré sobre ustedes, porque yo «soy D-ios y te sanaré».
En esa frase en hebreo aparece el nombre de Iyar. Entonces parece algo conflictivo; si no voy a poner ninguna plaga sobre ti, ¿por qué voy a necesitar sanarte? Nunca las pondrá nadie sobre nosotros, pero eso no quiere decir que nosotros no seamos capaces de crearlas por nosotros mismos.
Por esta razón, el Rey Salomón, el día que decidió comenzar a construir el templo de Jerusalén fue hoy (Luna Nueva Tauro o Iyar).
Tenemos la idea que un templo es un lugar de oración. Al templo de Jerusalén nadie iba a orar. El templo era el hospital público. No existía la idea de hospital, la gente entendía que por la única razón que uno se podía enfermar era por alguna deficiencia metafísica que lo estaba afectando físicamente, y lo que hacían era ir al templo a hacer algún tipo de reparación metafísica con ofrendas o rituales de purificación y periodos de cuarentena, dependiendo del tipo de enfermedad.
¿Cómo funciona la enfermedad?
La idea de este conocimiento subjetivo, Daat, que hablábamos anteriormente también tiene que ver con nuestra capacidad de conectar con algo.
Está escrito en el Génesis que Adán conoció a Eva y Eva quedó embarazada. La palabra «conocer» es un sinónimo de conectar. Obviamente que tuvieron relaciones sexuales, pero la Torá reemplaza la palabra coito por «conocimiento». Cuanto uno conoce o lo que uno reconoce de las cosas, es con lo que uno conecta. Con lo cual, lo que hoy está disponible es la energía de sanación y lo que va a estar durante todo el mes, pero hoy está en su grado de mayor potencialidad. Lo que queremos hacer es conocer cómo funciona el sistema.
Para conocer qué significan cada una de las enfermedades, entren en Internet y busquen: «Diccionario de enfermedades emocionales», y van a encontrar la relación que hay entre cuales son las emociones que terminan generando una determinada enfermedad, por que, como dicen los sabios de la Cábala desde hace miles de años, no existe enfermedad que no sea producto de una represión emocional. Alguna emoción que no está encontrando una salida a través del mundo de acción, porque la emoción corresponde al mundo de formación (Olam Yetzirah) y lo que está tratando de formar es una realidad física.
¿Cómo se manifiestan esas realidades físicas?
A través de nuestra acción. Es decir, que toda acción que nosotros reprimimos, termina manifestándose de alguna otra manera físicamente, sea creando una realidad que enferma a nuestro alrededor y nos pone desafíos y problemas que nos lleva a ver nuestra deficiencia emocional o simplemente enfermando al cuerpo.
El esfuerzo que tiene que hacer el cuerpo para enfermarse para poder entregar el mensaje que tiene que entregar es tremendo, porque la esencia del cuerpo de un ser humano es la inmortalidad.
No existe una enfermedad que no sea producto de una determinada emoción reprimida. A veces la gente dice: «¿Cómo es que tal y tal persona que es tan buena se muere de cáncer y que este otro hijo de * que vive gritando a todo el mundo, no?
El tipo que le grita a todo el mundo y lo saca de sus entrañas en el instante en que le viene, más allá de los problemas que le genere en su vida (esa es otra cosa distinta), de cáncer no se va a morir nunca.
Toda emoción reprimida genera una enfermedad que reprime la capacidad física de incurrir en la misma situación que genera la emoción.
Por ejemplo: una persona necesita aprender a decir que no en su vida, entonces un día se levanta con el cuello duro y no puede hacer el gesto de negación. La enfermedad le dice: ¿ves? no pudes decir que no. ¿quieres curarte de esto? préstale atención a esto, ahora esto es lo único que importa. Di que no en tu vida a eso que le estás diciendo que sí.
Te duele la rodilla, ¿por qué? porque te estás doblegando ante la voluntad de alguien. Ponte firme, no dejes que otro doblegue tu voluntad y ya no vas a necesitar la operación de menisco.
La persona busca como golpearse para autoenfermarse de manera tal que reciba el mensaje. Cuando decimos esta situación o tal y tal persona me enferma, por eso uno de lo métodos para que una persona se sanara en la época del templo era que el sacerdote lo revisaba y le daba una cierta cantidad de tiempo de cuarentena. Se tenía que ir de su casa, de su situación familiar que lo enferma. Más allá de que sea él el que está creando esa situación, el irse de ahí y no tener los personajes con quien pelear o con quien sostener esa percepción, inmediatamente comienza a sanar.
La enfermedad siempre se inicia en la emoción, en reprimir la emoción o en la falta de emoción. En el árbol de la vida la emoción se encuentra en las sefirot que están después de Daat (Jesed, Guevurá, Tiferet, Netzag, Hod y Yesod).
En Cábala no existe el espectro del bien y del mal. Para nosotros es más fácil pensar que si. En Cábala hay un espectro que va desde el egoísmo al altruismo, de lo inmaduro a lo maduro. No existen las personas buenas y las personas malas. Hay personas inmaduras y personas maduras.
¿Qué hace que una persona sea madura? Su capacidad de hacer por los demás, su nivel de altruismo. La capacidad de recibir placer a través de hacer por el otro. Cuanto más egoísta es una persona, más placer recibe de que los demás hagan por él y de él a hacer por sí mismo. Este tipo de deseo que hace feliz a ese tipo de personas en hebreo se llama: Ratzon Atzmi (deseo egoísta). Las iniciales de la palabra escriben RA. RA=MAL. El mal que hay en el mundo no es otra cosa más que la manifestación del deseo egoísta de alguien.
Lo que hay del otro lado del espectro es el altruismo. Es que lo único que te de felicidad-satisfacción es lo que eres capaz de hacer por los demás.
Cada una de estas emociones está en cada uno de nosotros en algún estado de maduración. Ese estado de maduración es un lugar en el espectro.
Por ejemplo: Jesed, el amor, es un amor primordial, no es una cosa buena. El amor no tiene bueno o malo, es una emoción primordial. Lo que tiene es un espectro de vibración entre la muy baja frecuencia del amor egoísta al amor altruísta.
Otra cosa a tener en cuenta es que estas emociones primordiales son emociones, algo que la persona emite, y esa emisión pone en movimiento la realidad. Mueve a nuestras acciones, literalmente a la fisicalidad que nos rodea. Y según el nivel de altruismo o egoísmo que tengamos en cada una de estas emociones es la realidad que vamos a crear.
La falta de una de estas emociones, o el equivalente a una emoción apagada, genera miedo. El miedo no es producto de la inseguridad, el miedo es producto de tu falta de amor. En cualquier área de tu vida donde sientes miedo es porque en ese área de tu vida no das, no eres valioso, no proyectas, no emites amor.
¿Cómo te das cuenta que tienes miedo? El miedo siempre genera violencia. Entonces fíjate en dónde eres violento hacia los demás o hacia tí mismo.
La mayoría de las enfermedades que nos producimos a nosotros mismos con la comida, el cigarrillo, las que literalmente son cosas que hacemos en contra de nuestra integridad física, son producto del miedo. Y ese miedo es producto de la falta de amor. Y no es que no te están dando amor, es que tú no das amor. Si tú fueras una persona amorosa, es decir, si pensaras más en los demás que en ti mismo, literalmente sentirías la protección de que nada te puede pasar. La inseguridad es una sensación que es como un sistema de GPS. Te localiza a gente egoísta que necesita aprender alguna lección.
Todos estamos todo el tiempo en el lugar y en el tiempo correcto, pero sólo tiene suerte aquel que aprende la lección de ese tiempo y espacio.
Entonces en el tiempo y espacio en donde una persona está sufriendo algún tipo de enfermedad física, ese el el tiempo y espacio en donde la persona tiene que indagar.
¿Dónde comienza la sanación?
Primordialmente en la aceptación de la enfermedad y el reconocimiento del origen de la enfermedad.
Uno de los potenciales problemas que tenemos con las enfermedades que son más silenciosas (que aparecen de un día para otro) es que si prestan atención, Zer Anpin (la emoción), se alimenta de Binah, que es el mundo de la creación. ¿Quién es el creador literal de cada uno de nosotros? Nuestra madre, nos creó físicamente. Nos gestó, nos fabricó y esa señora tuvo nueve meses para «jodernos la vida«, después tuvo unos años más, y a lo mejor aún lo sigue haciendo, pero lo que la madre piensa cuando está gestando a un hijo es uno de los sistemas de programación.
Nosotros elegimos a esos padres para lo que nosotros necesitábamos según la corrección que vinimos a hacer a este mundo.
Si la enfermedad es lo que la gente llama hereditaria, lo primero que tienes que entender es que no es cierto, nadie hereda una enfermedad. Todos heredamos un ADN que tiene la capacidad de enfermarte y de matarte de lo mismo que se enfermó y murió cada persona que vivió antes que tú los últimos 5.000 años en tu árbol genealógico. Así que si fuera por esa razón, todas las enfermedades serían hereditarias. Nosotros tenemos información en nuestro ADN capaz de matarnos de la cosa más loca que se te pueda ocurrir. La genética está llena de posibilidades, pero una vez que aparece se empieza a duplicar.
¿Qué hace que el ARN saque una copia de algo que va a terminar enfermando a la persona en algún tejido, en algo? En la parte física la proteína no tiene que ver con el ADN, lo que se copia o no cuando se reproduce una célula, lo que copia es según el estímulo externo. La proteína físicamente no tiene libre albedrío. Copia según la percepción que el dueño de esa proteína tiene de la realidad que lo rodea. Su medio le ofrece una información y cómo él y nadie más que él interpreta a esa información. Es lo que dice a cierta parte del cuerpo: enfermémonos de algo que nos haga dar cuenta que tenemos este problema y que está en un nivel inconsciente. Y tiene un solo propósito: hacerlo consciente. En el momento que la persona lo hace consciente y lo acepta, comenzó a sanarse.
De hecho, para lo que sirven los médicos es para que te digan de qué estás enfermo, para que tú luego hagas el trabajo. Lo máximo que puede hacer un médico con la enfermedad de una persona es empujarla desde el cuerpo físico a lo que se llama en Cábala: luz circundante o estado potencial.
Cuando la persona dice: se curó de cáncer. No se curó de cáncer, el cáncer está en remisión afuera del cuerpo de la persona, pero está latente. Ahora, todas las personas que tienen cáncer, pueden curarse del cáncer realmente, curarse al encontrar la causa. Y la causa puede venir de tu interpretación de la realidad, puede venir de la interpretación de la realidad que tus padres te inculcaron, lo que te inculcaron que te hace percibir la vida de una determinada manera que seguramente te va a llevar a enfermarte y morirte de lo mismo que se enfermaron y murieron tus bisabuelos, tus abuelos,…
Lo que es hereditario es esa programación de mierda que vienen trayendo desde hace tres generaciones porque a él le tocó estar en la guerra. Pero tú no vives en Europa en 1.940. Entonces si sigues trayendo esa programación del campo de concentración a la vida diaria, te va a pasar lo mismo que le pasó a esa persona cuando se enfermó y se murió.
Esto es algo que hoy (Luna Nueva de Tauro) uno lo que tiene que hacer es sacarse la mochila y dejarla. Incluso si eso significa que no le hables a tus padres durante los próximos 40 días. Hoy es un muy buen día para hacer una cuarentena de familia que te enferma. Pero si no es la cuarentena, es al menos sacarse la mochila y empezar a vivir una vida más liviana.
Respecto a la percepción, recomiendo ver el curso: Los secretos místicos del éxito.
Este sistema que en el árbol de la vida nosotros graficamos como esferas, en realidad son cortinas, capas. El propósito de esas cortinas es filtrar la cantidad de luz que baja desde Kéter. Haciendo un símil como si Kéter fuera una central nuclear nosotros en Maljut seríamos como una licuadora y Zeir Anpin una moledora. Estas capas tienen un propósito y son llamadas en Cábala: cortinas. Estas cortinas son velos que disminuyen la cantidad de luz que desciende, pero no la potencialidad que tiene esa luz.
La idea central detrás de estas llamadas «cortinas» es que como toda esta realidad es una gran esfera, toda cortina entre una realidad y otra, entre un estado de maduración y otro, como sea que esté nuestra vida, toda cortina está siempre a la mitad, en el punto medio.
Este mundo en donde nosotros vivimos es llamado en el Zohar: El espejo translúcido. Un espejo translúcido es un cristal, pero muchos de los cristales que conocemos en algún momento actúan como espejos. Cuando hay más oscuridad del otro lado que desde donde uno está mirando. Si afuera está oscuro y aquí hay luz, veo mi reflejo en el vidrio, es decir, el vidrio se convierte en un espejo.
En este ejemplo se resume todo el conocimiento de la Cábala. Este mundo para nosotros es un vidrio translúcido que puede o no funcionar como un espejo. Este vidrio se ubica a la mitad del camino, en el punto medio. Exactamente a la mitad de distancia entre esa persona con la que tengo un determinado problema y yo, o entre ese desafío que quiero alcanzar en mi trabajo y yo. Lo que sea que estoy tratando de alcanzar en mi vida, a la mitad del camino hay un vidrio, metafísicamente, que es la cortina del punto medio (emociones,..).
En general, entre esa persona con la que tengo un problema y yo , a la mitad hay un vidrio. Puede ser translúcido y desaparecer como obstáculo, en la medida en la que yo perciba más luz de aquel lado que de este lado.
Cada vez que yo perciba más oscuridad del otro lado que de donde estoy yo, el vidrio comienza a convertirse en un espejo y me muestra mi reflejo.
Toda dificultad en esta vida, toda cosa que no podemos alcanzar, todo aquello que nos muestra carencia, oscuridad, pelea, como le quieran llamar, es porque nuestra percepción de esa realidad determinada, ve oscuridad de aquel lado o ve más luz de este lado.
Tu ego te dice por ejemplo:
«Es un hombre muy inteligente, aunque no tanto como yo, pero es un tipo muy capaz.»
—> Acabas de poner una barrera entre esa persona y tú que no se puede atravesar. De la única forma que se atraviesa esa barrera es si el otro es tan inteligente como yo soy. No tengo que pensar que yo no soy inteligente, pero tengo que asumir que todos los demás, al menos aquellos con los que quiero tener una relación de cercanía, son igual de inteligentes que yo.
Cuando yo percibo la misma cantidad de luz o aún más luz del otro lado (y es preferible percibir más luz), no te preocupes, toda la gente del mundo te va a desilusionar en algún momento, pero no importa, es preferible que alguien te desilusione, a ver constantemente en los demás el reflejo de tu sombra, porque en esa sombra vive la enfermedad.
«Me enferma ese tipo»: ese tipo es el que estás viendo en el espejo. Tiene cara de otra persona, ahora, si yo veo luz del otro lado, no hay obstáculos.
Lo único que me puede impedir algo y terminar enfermándome es mi propio espejo. Es mi propia sombra. Y ojo, la enfermedad no se cura imaginándote luz. Hay que cambiar la percepción, porque nuestros cuerpos biológicamente, no conocen la mentira.
Nuestro cuerpo físico, que es el que se enferma, es un animal. Nosotros somos un ángel encarnados en un animal. En la parte biológica, que es donde la gente se enferma, el animal no conoce la mentira.
Tu pareja te puede mentir y decirte que no te engaña, pero tu cuerpo sabe que te engaña, porque biológicamante estamos todos interconectados y hay intercambio de células. Cada vez que abrazas a una persona, le dejas metafísicamante una parte tuya y te llevas una parte del otro.
No hay forma que uno no sepa, biológicamente sabemos todo. Ahora, si te quieres hacer el tonto, está bien, pero debes saber que tiene un precio. Nadie se va a enfermar por engañar a su pareja y ninguna pareja se va a enfermar por saber que lo engañaron, pero por hacerse el tonto de que lo engañaron si.
Después están los contratos sociales de lo que ya decidimos que está bien y que está mal. La realidad depende de nuestro reconocimiento, de cómo reconocemos la realidad.
Una de las cosas que una persona tiene que empezar a hacer, al menos para prevenir futuras enfermedades y ciertamente empezar a hacerlo si está enfermo, es dejar de castigarse a sí mismo. Es aceptar la sombra.
Ok, eso es lo que me muestra le espejo, no te puedes dar la vuelta y hacer que no está ahí. Lo que tienes que hacer es acercarte al espejo, tratar de verle los detalles y aceptarlo. ¿Cómo no lo vas a aceptar si eres tú mismo? Acepta que todavía no eres tan perfecto, porque en el momento que puedas aceptar que no eres tan perfecto, además de dejar de autoenfermarte, también vas a poder aceptar que los demás no sean tan perfectos.
Porque no se trata de que yo tenga que ser perfecto y los demás también. Porque nunca voy a tener a nadie cerca mío, a menos que yo esté pidiendo un maestro, que generalmente es alguien que viene por el lado del dolor para la mayoría de la gente. Nunca voy a tener al lado mío alguien que sea inmensamente mejor que yo. No sucede, porque la gente atrae a la gente por afinidad de forma. Siempre el que va a estar cerca tuyo es igual de imperfecto que tú.
En el momento en que yo puedo aceptar mi sombra, estoy empezando a aceptar que la gente que me rodea también tiene sombra. Eso no quiere decir que yo tenga que cortarlos de mi vida.
Empieza a aceptarte a ti mismo y empezarás a aceptar que el otro no tenga que ser tan perfecto. Empieza a ver al menos la misma cantidad de luz del otro lado. No hace falta ver más luz para que desaparezca el vidrio, la misma cantidad ya alcanza para que el velo desaparezca.
Una de las ayudas que tenemos es la combinación de YHVH (del nombre de Dios) que corresponde a este mes y ésta es la razón por la que el mes de Iyar es el mes de sanación. Es la combinación de como se suponía que el YHVH tenía que ser antes del pecado de Adán. Inicialmente este mundo tenía que ser un espejo de los planos metafísicos y lo que sucedió con el famoso pecado de Adán es que hoy, el cuerpo físico y la acción están por debajo de la emoción. Inicialmente el proceso iba a ser: emanación de un pensamiento divino seguido del pensamiento creador, y ese pensamiento creador iba a dar lugar a la acción y luego vendría la emocion.
Hoy comenzamos a pensar: ¿podré? ¿tendré los recursos? ¿estará bien? ¿qué va a pensar la gente?
Originalmente tenía que ser: Emanación-Creación-Acción y luego Emoción.
¿Cómo serían nuestras emociones si todo el tiempo pudiéramos hacer lo que viene a nuestra mente que quisieramos crear? ¿sentiríamos miedo, angustia, incertidumbre? Si sabes que se te ocurre algo y en el acto lo puedes hacer.
Lo que ocurrió fue que la acción, el cuerpo físico, cayó por debajo de la emoción y hoy depende de la emoción, hasta que la persona levanta este mundo físico y lo pone por encima y dice: Vamos a sentir después, hoy vamos a preocuparnos de crear lo que vinimos a crear.
Esa energía de creación está disponible durante este mes. Este mes tenemos una especie de afinación que tiene que ver con la Cuenta del Omer. Es un periodo de introspección y de creación de un nuevo yo. Personalidad quiere decir máscara.
El amor incondicional es de ti hacia los demás. Tú tienes que aprender a aceptar a los demás como son.
Mucho de nuestra personalidad es una máscara, que tiene como propósito esconder lo que realmente somos, porque no nos gusta tanto lo que somos. Si no te gusta, crea algo distinto. Lo que estás intentando crear es una nueva personalidad. Pero no te pienses que esta personalidad que tienes ahora que te sirve para justificarte todos tus berrinches y todos tus problemas y carencias y lo que sea, es algo con lo que naciste. Es algo que aprendiste egocéntrimanente y cubrir tus carencias para que no se noten. Es algo que todos hicimos, pero no tiene por qué ser así mañana. Es como que te encontraste una semilla de algo, la semilla de ese nuevo yo y de repente tienes una macetita que tiene tierra calentita, abonada, húmeda y hoy es el día. Prodríamos probar.
Tiene un solo riesgo, y es que vas a terminar siendo alguien que hoy no conoces y eso probablemente te de miedo. Y tiene más que un riesgo, un peligro de caída, que es pasado mañana. Hoy es Rosh Jodesh, es una decisión que tomas y empiezas a ejecutar en las próximas horas, pero pasado mañana es Tauro, es la comodidad, y le cuesta moverse.
¿Cómo se evita enfermar?
Una de las primeras cosas es tener deseo de estar sanos cuando estamos sanos.
Cuando la persona está sana, está siendo sostenida por la energía de la salud. Uno de los aspectos primordiales del sustento de ser sostenidos por la energía divina, por dios o como lo quieran llamar es la salud.
La salud es algo que por lo general la gente desea solo cuando está enferma, porque generalmente queremos desde la carencia y no desde la abundancia. Una de las claves es pedir ser sostenido con la energía del bienestar físico cuando estamos bien; porque de la misma forma que sabemos que el dinero atrae dinero y la pobreza atrae pobreza, la salud atrae salud. El mejor momento para atraer más vitalidad y más salud a nuestra vida es cuando estamos sanos.
Cuando estamos enfermos generalmente estamos pidiendo salud pero desde un lugar de carencia y la carencia no tiene afinidad con la satisfacción y si lo que buscamos como satisfacción es salud, pedirlo desde la enfermedad hace que se compliquen las cosas, porque no tenemos afinidad con esa salud.
Entonces, lo primero que tenemos que saber para sostener un estado de salud, es que cada vez que nos sentimos bien, ese es el momento en que tenemos que pedir más sustento en forma de salud. Con el dinero, nadie que recibe dinero dice: ya no quiero más, y la gente generalmente hace eso con la salud. Cuando no tiene salud, pide salud y cuando la tiene, agradece y 2 ó 3 días más tarde se olvida.
La enfermedad sólo puede ocurrir en el cuerpo. Físicamente la enfermedad sólo puede ocurrir en el cuerpo. Y el cuerpo, respecto a nuestra existencia y en comparación a los mundos de emanación, creación, formación y acción, el cuerpo es el mundo de acción. Nuestra parte física es Olam Assiah, es el mundo de acción. Y el mundo de acción no puede ser modificado desde el mismo mundo de acción, puesto que el mundo de acción es un reflejo, es una sombra, esa algo que prácticamente no existe.
El mundo de acción es una ilusión física que manifiesta los estados emocionales e intelectuales. Es decir, manifiesta a los mundos de formación, de creación y emanación. Con lo cual, es cierto que si esa persona está enferma, esa enfermedad no empezó en el cuerpo, pero es en el cuerpo en donde se manifiesta.
La enfermedad es solo un aviso, no es algo real. Suena la alarma todo el tiempo que tenga que sonar hasta que la apagues.
Mucha gente en las mañanas, entre la que me incluyo, cuando suena la alarma, en lugar de apagarla y levantarnos, apretamos el botón de cinco minutitos más y seguimos durmiendo. La enfermedad es prácticamente lo mismo. Hay algo en el cuerpo que suena una alarma, algo que te muestra que tienes que salir del estado en el que estás y la mayoría de nosotros lo que hacemos es demorar, «apretamos el botoncito», tomamos una aspirina, tal vez vamos al médico o hacemos algo al respecto, pero no hacemos nada para cambiar la causa de la enfermedad. La causa es que seguimos acostados sin hacer nada, sin un cambio de estado.
La gente en la actualidad se enferma más que antes. Antes morían jóvenes, pero no se enfermaban tanto, enfermaban una vez y morían. Hoy la gente vive mucho más tiempo, pero la mayoría de la gente vive enferma. La mayoría de las personas mayores de 35 a 40 años, están constantemente tomando algún tipo de medicamento para algo. Desde lo más simple que es una aspirina para ciertos dolores o un antiinflamatorio, hasta personas dependientes a todo tipo de medicación para controlar el estado de ánimo y mental. Hoy se cree que es normal tomar ansiolíticos o todo tipo de medicaciones psiquiátricas.
Todo esto que ocurre en el cuerpo no es otra cosa que una alarma para mostrarle a la persona que hay una desconexión entre su pensamiento y su emoción y las acciones que realiza.
La emoción rara vez puede desconectarse del intelecto. Lo que sea que la persona piensa, eso es lo que la persona siente. La emoción siempre es producto de lo que la persona está pensando. Si la persona piensa que algo es bueno o malo, le da miedo, le da alegría. La emoción va a ser siempre un reflejo del intelecto.
El intelecto rige sobre la emoción, pero la emoción también rige sobre la acción. El problema es que a medida que nos hemos hecho seres más sofisticados y hemos comenzado a ver que hay una relación de causa y efecto entre las cosas que hacemos y decimos y los efectos que ocurren en nuestras vidas. Y porque le tenemos miedo a ciertas consecuencias adversas, hemos ido lentamente dejando de hacer lo que sentimos, porque muchas veces sabemos que lo que sentimos no es socialmente aceptado y que si hacemos algo que no es socialmente aceptado, va a tener consecuencias. Y las consecuencias, generalmente son pérdidas.
Es decir, en el momento en que haces o dices lo que piensas, seguramente va a haber gente que te va a marginar, y como nadie quiere ser marginado, la persona reprime su acción o lo que dice, con lo que termina no diciendo o no haciendo, o peor aún, termina haciendo o diciendo algo contrario a lo que siente.
Pero el mundo de la acción, Olam Assiah, es un súbdito de la emoción y el cuerpo es un vehículo para el intelecto y la emoción. El cuerpo fue hecho para que pueda manifestar físicamente lo que la persona está pensando y está sintiendo. Pero en este intelecto dual del árbol del conocimiento del bien y del mal, lo que el intelecto de Daat interpreta como bueno o malo es aquello que es confortable o no y la clave, si hay una corrección – tikún que tiene que hacer la persona que nace en el mes de Tauro es el perseguir constantemente la comodidad.
La esencia del taurino es la energía que va a primar durante este mes, porque este mes lo rige Venus y Venus rige primordialmente sobre el amor y sobre el sustento, pero desde un lugar de belleza. Todo lo que en este mundo tiene que ver con la belleza física, todo lo que percibimos como bello es porque la energía de Venus está presente.
Y con esta influencia, el taurino lo único que busca es que lo amen, que le proporcionen un lugar bello y que le dejen en paz. Lo único que quiere el taurino es disfrutar de la comodidad física de este mundo y esa es la corrección que todos nosotros tenemos que superar durante este mes de Iyar para lograr asegurar durante los próximos 12 meses una salud perfecta.
Tenemos que lograr no tenerle miedo a la carencia física, porque la única razón por la que la persona no dice lo que piensa o no hace lo que piensa y lo que siente es porque le puso un valor mayor a la fisicalidad,al beneficio físico, sobre todo al dinero, un valor mayor que el que tiene puesto en su propia salud.
Si la persona deja que su cuerpo manifieste lo que siente y lo que piensa, muchas veces le va a traer consecuencias adversas, pero no al cuerpo, sino cosas como que alguien te va a dejar de hablar, vas a perder algún negocio. Vas a sufrir las consecuencias en el plano físico externo y esa consecuencia seguramente va a hacer que quieras cambiar, pero lo que hay que cambiar no es que hay que empezar a fingir que uno piensa de otra forma o fingir que uno siente de una determinada manera para no tener la consecuencia adversa.
Lo que hay que cambiar es la percepción, hay que entender que todo es perfecto. El cambio para dejar de ser reactivos y dejar de ser personas nocivas que generamos consecuencias adversas en nuestra vida, tiene que provenir de un cambio en el intelecto, en nuestra percepción de la realidad y en nuestra capacidad de ver que todo es bueno, que todo es perfecto. De lo contrario, lo que ocurre, es que cada vez que fingimos a través de nuestras acciones, nuestro cuerpo lo resiente.
Es decir, como uno se salvó de la consecuencia física de sentir un dolor físico, económico o social o en el ego, en la aceptación de los demás o en lo que sea, como uno se salvó de eso por haber fingido, lo que ocurre ahora es que el cuerpo lo resiente. Lo va a seguir sintiendo una y otra y otra vez hasta que te des cuenta.
Genera bloqueos físicos que no te permitan hacer eso que fingiste, porque la enfermedad siempre va a tener algo que ver con la emoción y el intelecto que uno debe corregir.
Uno de los niveles más sofisticados o en donde hay que prestar más atención en todo esto es en las letras del mes.
En el mes de Nisan, de Aries, la persona sale libre del faraón. Las letras de faraón en hebreo quiere decir: boca mala o egoísta. Las letras de este mes son PEI VAV. La letra PEI se puede leer como boca, y tiene dentro otra letra escrita, la letra BET, que corresponde al mundo de Briah, el mundo de creación y también tiene que ver con la palabra «bendición«. La verdadera bendición es que la boca produzca bendiciones y no enfermedades.
La boca evolucionada en la que estamos entrando en el mes de Iyar es la boca de la creación y esto tiene que ver con la capacidad de utilizar el lenguaje para crear y no para destruir.
Durante este mes es primordial que se cuestione antes de hablar si lo que se está por decir crea o destruye. Y si lo que se está por decir destruye, tiene que rápidamente indagar en su intelecto y en su emoción de dónde proviene este deseo destructivo de la boca. Todo esto tiene que ocurrir si interrumpir la coherencia entre el pensamiento y la emoción.
Por ejemplo: se presenta una determinada situación donde uno tiene que abrir la boca para detener algo, una situación o para que algo ocurra de una manera distinta a cómo está ocurriendo. Pero uno sabe que si abre la boca y dice, tal vez se arruine todo lo que está ocurriendo. Siente la emoción y tiene el intelecto y siente que tiene que decir algo, que no puede quedarse callado. Lo que la persona tiene que indagar rápidamente es desde dónde proviene ese intelecto, ¿proviene del ego? ¿tengo la necesidad de decir algo porque no quiero parecer un tonto o realmente sé que está ocurriendo algo en detrimento de otras personas y que yo lo puedo detener y si lo puedo detener es a través del habla?.
De cualquier forma, si digo algo, esa situación, esa amistad, ese negocio, se va a destruir. Lo que hay que analizar es si mi ímpetu y mi deseo de decir algo, proviene de querer satisfacer mi ego o que es lo correcto.
Este análisis constante durante los próximos 30 días, de dónde proviene mi motivación para hablar es fundamentalmente porque durante este mes estamos en el periodo de la cuenta del Omer, todo lo que hagamos va a tener una intensidad mayor y si vamos a poder crear con nuestra habla, se va a crear mucho más y con un impacto mucho más grande. Pero también aquello que tenga que destruirse se va a destruir con una velocidad y una eficacia que rara vez vamos a ver en otro momento del año.
Lo importante es salir de la zona de confort. Decir o hacer porque se que es lo correcto, por las enseñanzas que tengo, por lo que estudié, por lo que mi intelecto y mi emoción me están diciendo y no porque estoy utilizando el habla o mis acciones sólo para procurarme confort físico, aunque sepa que está mal lo que estoy haciendo.
El planeta Venus rige este mes. Venus en hebreo se dice: NOGA y la palabra noga está conectada con el cuarto velo. Hay cuatro mundos y cada uno de estos mundos está separado por un velo, y de la misma forma hacia el lado del egoísmo, de la clipá o negatividad, también hay cuatro velos, cuatro cáscaras o cuatro clipot.
Es lo mismo que una naranja: hay una capa naranja que se ve por fuera, luego hay otro nivel de la cáscara, otra clipá, que es la parte blanca. Cuando uno pela la naranja y mira la cáscara, la parte blanca, va a notar que en la parte blanca hay pegada una pequeña membrana brillosa. Esa es la tercera cáscara. Una vez que uno sacó los tres niveles, sobre el gajo, la pulpa, hay otra cáscara, que es la que sostiene el gajo, la que hace al gajo, pero esa, no tiene sabor amargo y la consideramos comestible. Esta clipá es NOGA, es una parte de la realidad que los cabalistas explican que es una parte de la esencia misma de la vida, que son esas pequeñas negatividades, estas pequeñas clipot, cáscaras o desechos que están adheridas a nosotros, y como están adheridas, se sienten que son lo mismo que nosotros.
Nosotros que tenemos cierto conocimiento, tratamos de eliminar la cáscara. El conocimiento espiritual es una forma de eliminar la cáscara, el proceso de sufrimiento, sin embargo, siempre queda esa pequeña membrana que se llama clipá NOGA, que es la que está adherida al cuerpo y los cabalistas nos dicen que la clipá NOGA es mitad bueno y mitad malo. Representa en este mundo físico al árbol del conocimiento del bien y del mal y depende solo de la persona hacer de esa clipá algo totalmente comestible.
Esa clipá NOGA en nuestra existencia como seres humanos es nuestro cuerpo. Nuestro cuerpo es mitad bueno y mitad malo, por decirlo de alguna forma. Tiene todo el potencial de ser absolutamente altruista y tiene también todo el potencial de ser absolutamente egoísta. De hecho, la conciencia innata del niño o del ser humano inmaduro es ser absolutamente egoísta.
Y de eso se trata el mes de Iyar, de romper la barrera del deseo de comodidad que tiene el cuerpo y utilizar al cuerpo para servir al otro.
Un gran cabalista dijo: «Todo lo que la persona puede pagar con dinero, no tiene que pedir descuento» (Es raro esto). Todo lo que uno puede pagar con dinero tiene que felizmente pagarlo con dinero, sin pedir ningún tipo de descuento, porque en realidad hay dos formas en como se pagan las cosas. Pagar quiere decir el precio que tiene el nivel de egoísmo que todavía tengo, tiene un precio en este plano físico y uno lo paga o con el cuerpo o con los bienes materiales. Sobre todo porque el cuerpo no deja de ser un bien material, pero en definitiva, uno lo paga de una forma u otra y es preferible pagar con dinero.
Hoy en día las personas le han puesto un valor tan alto a las pertenencias físicas y al dinero que la gente prefiere pagar con enfermedad y no manifiesta físicamente lo que piensa y lo que siente por miedo a la consecuencia de perder cosas físicas.
El hombre fue creado. El alma fue inyectada dentro del cuerpo físico. Dios sopló Ruaj-espíritu dentro del hombre y el hombre vivió. Con lo cual, el Ruaj, el espíritu, quien nosotros somos es algo que existe todo el tiempo, el cuerpo es lo que se crea, se gesta, se forma y se utiliza como vehículo para la manifestación del alma. Y un gran rabino cabalista dijo que Dios creó al hombre como a un animal y tomó el alma de Adán y la puso adentro de este animal para ver si tiene la fortaleza de conquistar a ese animal y hacer que sirva a Dios. Cuando se refiere a Dios, es el creador, el sistema de creación.
El hombre tiene que tomar control del cuerpo físico y dominar el aspecto animal de la búsqueda constante de confort para volverse creador y en esa esencia creadora, va a poder crear, aunque no sea lo que está buscando, va a crear verdadero e infinito confort, que es la capacidad de poder estar en cualquier situación, en cualquier lugar del mundo, en un hotel de 5 estrellas o en una caseta y sentir satisfacción absoluta, sentirse lleno, sentirse completo.
Hay gente que no sabe cómo vivir sin una serie de accesorios físicos que le den confort al animal, al cuerpo. Y no tiene nada de malo disfrutar del mejor hotel del mundo, el problema es cuando no puedes disfrutar estar vivo si no lo tienes. Y normalmente a la gente que le ocurre esto suelen no tenerlo. Sólo cuando la persona puede disfrutar de la vida en cualquier situación, es cuando empieza a tener verdadero acceso a los grandes confort del mundo, porque lo que la persona está buscando no es confort, sino está buscando revelar la belleza interna de esas pertenencias.
Si hay algo que tenemos que lograr en este mes para tener un seguro de salud verdadero, pasa por la coherencia entre el pensamiento, la emoción y la acción.
Si después esa coherencia trae consecuencias físicas que terminen generando algún tipo de despojo físico, hay que aprender de la lección y empezar a ver dónde tengo que cambiar el intelecto y la emoción para que eso no me vuelva a ocurrir.
Pero la clave de preservar el cuerpo como vehículo sano para seguir creciendo es dejar que las cosas ocurran, decir lo que tenemos que decir, hacer lo que tenemos que hacer y medir desde la consecuencia de nuestras palabras y nuestra acción, si estamos haciendo y si estamos vibrando, pensando de manera correcta.
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